Nuestro juego transcurre en un entorno histórico: pretende ser lo más auténtico posible y representar visualmente la Edad Media como realmente fue, y no como la vemos en los clichés, a menudo muy engañosos, del cine y la televisión.

Quisimos crear un mundo en el que por fin pudieras ver las cosas como eran en realidad en aquel momento: cómo vivían y se vestían las personas y cómo era el entorno —que nos resulta tan familiar— en una era en la que la gente se relacionaba con él de manera bastante diferente a como lo hace hoy.

Por lo tanto, las ilustraciones para Kingdom Come también se crearon de manera diferente. Usar la imaginación seguía siendo necesario, pero con el respaldo de investigaciones históricas, consultas a expertos y el estudio de archivos.