Nova Roma

La gloria del Imperio romano es cosa del pasado y ahora reinan la decadencia y el declive. Lideras un pequeño grupo de ciudadanos en busca del lugar idóneo en el que construir Nova Roma: un bastión para todo lo que traía prosperidad al Imperio. Tus comienzos serán humildes, con apenas una aldea. Pero, a partir de ahí, tendrás que calmar a los dioses con grandes templos, satisfacer las numerosas necesidades de tus ciudadanos y crear una sociedad que sea la envidia del mundo durante milenios.

Para planificar bien una ciudad, hay que aprovechar el mundo que la rodea. Controla el flujo del agua mediante presas gigantescas y acueductos para moldear el terreno con cuencas y embalses artificiales. Construye la infraestructura necesaria para encontrar depósitos de recursos lejanos y transportar los materiales en bruto a lo largo de vastas extensiones de tierra virgen. ¿Mantendrás el equilibrio entre el ritmo de la expansión urbana y sus riesgos, o te dejarás llevar por la soberbia y tentarás a los dioses y a la propia naturaleza?

Enfréntate a una lista de necesidades y deseos que no dejará de crecer a medida que lleguen nuevos ciudadanos. Alfarería, vinos, panes, juegos, educación, fe: es responsabilidad tuya mantener al pueblo contento y a salvo. Convierte a tus ciudadanos en académicos y gladiadores, entrénalos en la lucha y el arte dramático y guíalos mientras pasan los días trabajando y las noches disfrutando de los frutos de su esfuerzo.

Tu séquito de consejeros y senadores te informará de la multitud de problemas que surjan: desde asuntos de impuestos a invasiones hostiles, tu autoridad te permite proclamar edictos y avanzar tecnológicamente por el bien de tu ciudad. No obstante, recuerda que hay fuerzas que actúan por encima de ti. Construye templos para evitar la ira de los dioses y asegurar la prosperidad de Nova Roma.

Nova Roma se vale de simulaciones complejas del agua y el clima, así como de la constante amenaza de la intervención divina, para explorar los retos culturales, políticos y militares de su era. ¡Ponte al mando de un pequeño pueblo romano y conviértelo en una metrópolis bulliciosa que perdure durante siglos!